¿A qué parte del mondo se entiéndono como acá: catalane co españole, andaluce co madrileño, napoletano co genovese, romañolo co calabrese? A nenguna parte. Este e no paraíso. Ese na jauja. ¡Ne queremo todo! (Abrazándolo.)
¿Verdá, otomano? ... Eso que dicen que turco e taliano so como perro e gato, maccanéano. (Teniéndolo estrechamente.) Mira un poco (El turco sigue triste, frió, no se levanta de su silla.) Ne tenemo afecto, cariño puro, sincero amore. (Parece que se va a fotografiar.)
"PEPPINÓ.- (A Sara.) ¡Qué labia tiene mi viejo!... Si se queda en Italia se lo traga a Orlando. (Siguen en voz baja sus arrumacos.)"
Difícil, precaria, inestable armonía, sin embargo, que habitualmente perturbaban los prejuicios étnicos y nacionales en el hervidero cosmopolita de los patios conventilleros.
Félix Lima ha captado uno de estos momen tos de quiebra en "Lo ha dicho l?Aquensia Stefani", cuadrito incluido en su libro Pedrin (1923), que retrata con previsible fidelidad las peloteras entre italianos y "turcos" durante la guerra de Tripolitania.
"En el hall de un conventillo empotrado en la zona ítalo-turca de la calle Reconquista. A la hora vespertina en que los inquilinos hacen "un puquito di pulítica ternacional".
-Siga liyendo l´otros tilegramitas dil diarios, osté que sabe de ler.
-¡Deseguido, Scopetta! "Roma, due.
-L?aquensia Stefani dis... dismiente il..: il romor dil vara... varamiento dil incrociatore ´Pisa´ in la costa tripolitanias".
-¡Craro! ¡Macanita di lo turco qui li mandan a l?inglés di lo diario d?lnglatera! ¡Ya verán come ¡I ducca degli Abruzzi foguétea cun l´iscoadra tomañas! ¡Ne para impisar cun lo bastimento dil nostro "Vittorio Emanuele"! ¿Vamo a l?armacín a fistecar il trionfos, compatriotas? ...
E... vamo.
Scopetta Duilio, "artillero" de la municipalidad -maniobra de noche- y Benincasa Ercole, infante de la misma -primo regimentó di barendieri- se dirigieron en tren de demostración aguardentosa a la copistería dé la esquina. Pero antes de anclar avistaron el cajoncito de Abraham Miguel, vecino de cotorro. Y Scopetta se le fue al abordaje.
-¡Trionfo in toda la líneas! Tre turpidiero di ostedes a piques... lo grando piróscafo di ostede ogualmente a piques... la bandiera tricolore incima di Trípoli... coatro patachún cun mélicos di ostede también a piques...
¡Se acabó la Turquías!
-Tudo eso istá ¡a vinte, a vinte!
-¡Altro qui a venti! ... ¡A coaranta curpe di cañunata per minutos! ¡Fogueteamo cun ostede!
-Atienda qui voy disir yo: Turquía tiene tanto soldado como Alamania qui también Alamania inseñó pitear soldado turco a la última moda.
¡Ouí vaya la gracia! Italia tira pique barco nosotro istá barco chico, piro Turquía más una dolor cabesa Italia pir la tierra. Si quieres más noticia soldado turco prigunta cómo fue la pilea con la Rusia.
¿Y la barco grande italiano qui fue pique la costa Trípoli? . . ¿Ouí desir osté, sañur, a eso? ...
-¡Macanita qui ostede li mandan a l?inglés de lo diario inglés!
-¡Diario "Assalán" dise cierto eso pique barco grande italiano, señor!
-¡Ma cáyese in poco, torquito di pacotiyas! ... L?aquensia Stefani no va disirina cosa per otras, ¿sabe? ...
-"Assalán" dise cierto.
-¡Gropitos, dun Mequele, gropitos... ¿E la so hica... agora... cun cuesto dirotamiento... sará mía ante di due cuindichena? ... So foturo yernos istá taliano, ma... ¡di almas turquitas per eyas!
-¡Hija mía no casa italiano! ¡Antes va calle vindiendo baine, baineta, y curasón santa Jisocristo!
-¡Sará mía como Trípoli sará d´ltalia! -rugió Scopetta "vencitore".
-¡No tiene miedo esa paradas! ¡Si quieres algo viene fuera!
Ruptura de narices e intervención de las potencias extranjeras (representadas por un chafe).
En la comisaría 1ra.
-¿Y éstos, agente, por qué me los pasa? -averiguó el auxiliar de guardia.
-Cosas de atualidá, señor. Resulta qu´este italiano se quiso hacer perdis con la Tripólitania...
-¿Del turco?
-No, señor, de la hija del turco."